Seguiremos inclinamos ante ti

Por María Delys Cruz Palenzuela

Porque eres El Mayor de todos los camagüeyanos, hoy, como tantas otras veces, nos inclinamos ante ti, porque a la distancia de siglo y medio de tu ascenso a la inmortalidad, cabalgas junto al pueblo que te venera.
Porque eres el héroe de pluma, machete y palabras,  de Las Minas, de Altagracia, de Guáimaro, de Consuegra... de Jimaguayú, tu dignidad nos conmina al combate cotidiano en ésta, tu tierra fértil por la sangre y el sudor mambí.
Al enemigo, tanto daño vivo como muerto, decía El Generalísimo; al amigo, al compatriota que con la historia aprendió a amarte bien, todo, de tal modo que no alcanzan los brazos y las manos agradecidos para levantarlos con flores y cantos de alabanzas.
Porque eres Ignacio, nosotras nos sentimos Amalia.
Porque eres el bravo y aguerrido jefe, el fiel compañero, ellos se sienten Sanguily.
No existe, ni existirá hombre o mujer de tu Camagüey, que pierda en la memoria y de su sangre  tu ilustre apellido, por eso somos agramontinos.
No habrá momento de festividad o tristeza en el que no contemos con el respaldo de tu ¡Vergüenza!.
Y porque eres quien eres, y porque somos lo que somos, nos inclinamos ante ti, Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz.